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Entrevista: Yesenia Herrera

Entrevista: Yesenia Herrera

Napisane przez: Bernat OLS Community Manager ()
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Entrevista: Yesenia Herrera 

Yesenia Herrera

Source: Yesenia Herrera

HOOOOOLAAAA exploradores/as . En esta entrevista, hablamos con Yesenia Herrera, una chica española que, en 2016, hizo un viaje impresionante: de las Islas Canarias hasta Bangladés en bicicleta. En tres años, visitó 17 países distintos y pedaleó más de 20.000 kilómetros. ¡Guau! Seguid leyendo si os apetece conocer su historia :-) 

 

Hola, Yesenia. ¿Te puedes presentar a la comunidad? :-)  

¡Hola! Me llamo Yesenia, tengo 35 años y soy de las Islas Canarias, concretamente de Gran Canaria. Soy enfermera y antropóloga.  

 
También eres una exploradora… 

Bueno, sí. Me considero una nómada. He vivido en muchos sitios y me gusta moverme. Siempre he tenido una gran inquietud por conocer otras culturas, lugares y paisajes. 

 
Hace unos años hiciste un viaje increíble. ¿Nos lo explicas un poco? 

A finales de 2016, dejé mi trabajo y mi piso de alquiler para hacer un viaje sin fecha de fin. En un principio, la idea era viajar de mochilera por Asia, pero luego pensé que sería guay hacer algo en bicicleta. Primero, recorrí las 8 islas de Canarias para conocerlas bien y ver como me sentía. Y la verdad es que me encantó. Después, cogí un barco hacia Huelva y allí empezó la aventura. 

 
¿Cuál fue tu itinerario? 

Pasé por Portugal, España, Francia, Italia, Eslovenia, Croacia, Bosnia y Herzegovina, Montenegro, Albania, Grecia, Turquía, Georgia, Armenia, Irán, India, Nepal y Bangladés. Quería atravesar Pakistán, pero me denegaron el visado al último momento. Entonces, dado que no era seguro entrar en Afganistán, cogí un avión hasta la India. Desgraciadamente, cuando me quedaban 100 kilómetros para llegar a Myanmar, llegó la pandemia y tuve que regresar a España. 

 
¡Guau! ¿Todo esto en cuánto tiempo? 

En tres años, aunque hice algunas paradas.  

 
¿Cómo lo preparaste? 

Más o menos, estuve un mes planificando el viaje en casa, pero, en ese momento, estaba llena de energía y quería empezar lo más rápido posible. Además, soy una persona que le gusta improvisar. Me descargué un itinerario para saber un poco donde ir, pero, rápidamente, me di cuenta de que no era necesario. 

 
¿Cuál era el objetivo del viaje? ¿Por qué decidiste hacerlo?  

Al principio, el objetivo era viajar, conocer mundo y romper con ese miedo que la sociedad nos instaura a las mujeres de que no podemos hacer cosas solas. Después, quise darle una perspectiva feminista. Me hice un perfil de Instagram y empecé a publicar fotos para que otras mujeres vieran que es posible hacerlo. A medida que iba cruzando territorios, me interesé por las historias de las mujeres que encontraba. De hecho, hice un par de pequeños documentales al respecto. 

 
¿Cómo financiaste el viaje? 

Soy enfermera y tengo que decir que siempre he podido trabajar cuando he querido, lo cual me ha permitido ahorrar. Además, soy una persona que necesita muy pocas cosas para vivir. Francamente, gastaba menos viajando que viviendo en mi ciudad pagando un alquiler. 

 
¿Cómo es viajar en bicicleta? 

Para mí, viajar en bicicleta es la mejor opción, ya que puedes ir a la velocidad que te dé la gana y te vas empapando de sensaciones todo el rato. De manera progresiva, vas viendo el cambio cultural de tu entorno. Por otro lado, es barato, sostenible y te da esa independencia de encontrar un lugar maravilloso enfrente de un lago y decir: "hoy me quedo aquí". Finalmente, llegar a un sitio por tus propios medios te da una satisfacción personal enorme. Cuando llueve, hace viento o tienes que subir una cuesta, es duro, no os voy a engañar, pero creo que compensa. 

 
¿Dónde dormías? 

En la bicicleta, en unas alforjas, traía conmigo todo lo necesario (tienda de campaña, saco y esterilla). Descansaba en cualquier sitio, siempre y cuando considerara que era seguro. Dormí en templos, iglesias, edificios abandonados, colegios o cementerios, así como en casas de incontables familias que me acogieron. 

 
¿Cuál fue el país que más te gustó o que más te sorprendió? 

La verdad es que no puedo quedarme con uno. Puedo decirte que la India es fascinante, que Irán es increíble y que Nepal es espectacular. Igualmente, me encantó Turquía, la puerta a Oriente. Allí, notas un cambio, una explosión de hospitalidad. Sentimos muchas cosas sobre los países musulmanes, pero la realidad es otra. Pese al tráfico y al ruido, también me gustó Bangladés, donde conocí a gente maravillosa. Lo que más me sorprendió a nivel paisajístico, fue el Cáucaso y Georgia en particular. Fui hasta las montañas y ¡guau! No me lo esperaba. 

 
¿Cuál es la cosa más bonita que te sucedió durante el viaje? 

El momento más mágico fue cuando organizamos una caravana de mujeres en bicicleta por Irán. En Turquía, me junté con Sara, una viajera gallega. Ambas queríamos ir a Irán, pero nos daba miedo hacerlo solas, por lo que dicen los medios de comunicación. Hicimos un llamamiento a otras mujeres que estuvieran en la misma situación para hacer un grupo. Al final, fuimos seis chicas occidentales recorriendo el territorio en bici. Iban a unirse varias mujeres locales, pero, finalmente, no pudieron, puesto que es muy complejo para ellas viajar sin una presencia masculina. Conocimos a adolescentes que alucinaron al encontrarnos. En muchas regiones del mundo no se ven mujeres viajando solas y mucho menos haciéndolo en bicicleta. Entonces, imaginaros el impacto. 

 
¿Cómo es viajar sola como mujer? 

Tienes que enfrentarte a una serie de cosas por las que los hombres no tienen que preocuparse. Los cicloviajeros que me encontraba tenían miedo a que les robaran o al ataque de perros. Nosotras, en cambio, a la agresión sexual. Hayamos nacido en España, en Italia o en Bangladés, en algún momento de nuestras vidas, hemos experimentado algún acoso o agresión. Obviamente, una puede viajar sola, pero se deben tener precauciones y entender bien los diferentes territorios por donde se pasa. 

 
En este sentido, ¿viviste algún episodio de peligro? 

El 95% de las cosas del viaje fueron buenas y solo un 5% malas. Desafortunadamente, los aspectos negativos estuvieron relacionados con los hombres. Por ejemplo, en Georgia tuve un susto. Estaba viajando con otra mujer que conocí en Portugal e hicimos autostop porque diluviaba. Dos chicos con una furgoneta nos recogieron. De repente, se desviaron del camino y, bueno, por suerte, supimos reaccionar a tiempo y pudimos bajarnos del coche. Muchos hombres piensan que las mujeres somos objetos sexuales. Algunos me ven sola en bici y asumen que estoy disponible para tener sexo. 

 
¿Cómo se afronta la soledad?  

Cuando una se siente sola, puede ir a tomar un café en un bar o intentar iniciar una conversación con alguien en una plaza. Pero en un viaje en bici te tienes que enfrentar a la soledad sí o sí. De todos modos, bien llevada, es una oportunidad para conocerse a sí misma. Son momentos que hay que convertir en positivos. En la India o en Bangladés, por ejemplo, era todo lo contrario. Nunca estaba sola. Entonces, a veces me agobiaba y necesitaba urgentemente tener un momento de aislamiento. 

 
¿Qué es lo más importante a la hora de hacer un viaje tan largo? 

Pensar que cada problema tiene una solución y no ir con una actitud pesimista. Si está lloviendo, se te rompe la bici o has tenido un día muy malo, pues pensar en positivo. Creo que eso es lo más importante ante un viaje así. 

 
Por curiosidad, ¿cuántas veces tuviste problemas con la bici? 

Muchas. Empecé el viaje con la bicicleta de 50 euros con la cual iba a trabajar. En Portugal, justo al inicio, me dio muchos problemas, porque no estaba preparada para llevar tanto peso. Se me pinchaba la rueda todo el rato. Ya en Donosti, en el País Vasco, compré otra bici de segunda mano, que es la que todavía tengo en la actualidad. Tuve algunos incidentes más con la llanta y la cadena en la India y en Nepal, pero nada grave. En realidad, no es un gran problema que se te rompa la bici. En ese momento tienes que coger aire, pero, casi todo se puede reparar. La bicicleta no es un coche, tiene un mecanismo sencillo. 

 
¿Qué te ha enseñado el viaje? 

Que las personas son buenas y que, normalmente, te quieren ayudar. Si tú vas con buena actitud, con una sonrisa y con buena predisposición, la gente te va a dar lo mismo. Lo que una transmite, se devuelve.  

 
¿Qué echas de menos y qué no del viaje? 

Las cosas que más echo de menos son el silencio, la soledad y las aventuras que te pasan en el camino. Y lo que menos, las incomodidades, como lavar la ropa a mano o ducharse con agua fría. Ahora, cada vez que me ducho con agua caliente lo valoro mucho. No nos damos cuenta de que es un privilegio hasta que no lo tenemos. 

 
¿Cómo fue volver a la normalidad? 

Pues fue duro. Yo me dirigía hacia el sudeste asiático y, de repente, me vi en casa de mi madre. Volví a trabajar de enfermera cuando yo era feliz viajando en bici por el mundo. Pero bueno, al final te adaptas y le encuentras cosas positivas. Yo vivo en Canarias, un lugar maravilloso, entonces tampoco fue tan catastrófico. 

 
¿Cómo es vivir en las Canarias?  

Son islas muy diferentes entre sí y cada una tiene su encanto. Aquí hay una buena vibra. Desafortunadamente, cada vez hay más gente y más construcciones. Pero bueno, aún se puede encontrar tranquilidad, sobre todo si te gusta el mar. La gran desventaja es la poca comunicación que hay, ya que para ir a cualquier lugar tienes que coger un barco o un avión. 

 
¿Y qué planes tienes para el futuro? 

Todavía no tengo nada programado, pero me gustaría hacer otro viaje largo en bicicleta. En Pakistán, México, Sudamérica o España. Estas son varias ideas, pero no tengo nada definido. 

 
Última pregunta y te dejamos tranquila: ¿Por qué crees que es importante viajar? 

Porque te rompe tus esquemas mentales y conoces a personas que no conocerías nunca en tu lugar de origen. Me fascina la diversidad de maneras de pensar, de estar y de concebir el mundo. En este sentido, viajar te acerca a otras realidades y creo que eso es superenriquecedor. De todos modos, no es para todo el mundo. Ahora está muy de moda, pero hay gente a la que no le gusta viajar y no pasa nada. 

 
Muchas gracias por la disponibilidad, Yesenia. Mucha suerte en tus nuevas aventuras :-)  

De nada, un saludo a todos/as.  


Espero que la entrevista os haya gustado. Si queréis saber más cosas sobre el viaje de Yesenia, os animo a que visitéis su blog, donde explica muy detalladamente la aventura. Por otro lado, en este tema de discusión podéis comentar la charla y debatir juntos/as sobre los viajes en bicicleta. ¡Hasta luego, equipo! 

Bernat, OLS Community Manager  Español 

Caravana de mujeres en Irán

Source: Yesenia Herrera